Antes de dormir, no cenéis mucho

Tortilla de patata Casa Alberto

El deseo de comer una cena copiosa o el antojo de picar algo dulce suelen aparecer al llegar a casa después de un largo día de trabajo. Los antojos nos hacen comer sin prestar atención a la sensación de saciedad, por lo que solemos comer más de lo que realmente necesitamos.

Intenta contrarrestar este fenómeno para no hacer tu digestión demasiado pesada ni perjudicar la calidad del sueño. Tu cuerpo debería usar las horas de sueño para regenerarse.

Lo mejor es comer pequeñas porciones para no comer mucho, especialmente por la noche.

Por lo que para cenar, qué mejor que unas tapas en Casa Alberto, variadas y para todos los gustos. Eso sí, recuerda que mejor cenar poco que mucho y evitar beber más de la cuenta para tener un buen descanso.